Oración diaria del domingo 28 de marzo: Fortaleza y Paz en Dios
Oración diaria del domingo 28 de marzo: Fortaleza y Paz en Dios
El domingo, día del Señor, nos encontramos en un momento especial para conectar con la fuente de nuestra fortaleza y paz: Dios. La oración diaria del domingo 28 de marzo nos invita a confiar en su amor y sabiduría, a buscar su guía en medio de las dificultades y a dejar que su paz inunde nuestros corazones.
En esta jornada, las palabras de Jesús y San Pablo nos recuerdan que Él es nuestra paz. El apóstol Pablo, en su carta a los Filipenses, escribe: La paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús. (Filipenses 4:7). Estas palabras nos invitan a buscar la paz que solo Dios puede brindar, una paz que no depende de las circunstancias externas, sino que se encuentra en la profundidad de nuestra relación con Él.
Reflexión del día: Paz en Dios
La reflexión del día nos lleva a meditar en las palabras de Jesús: La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo. (Juan 14:27). Estas palabras nos llenan de esperanza y confianza. Jesús nos promete una paz que va más allá de la paz que el mundo ofrece, una paz que permanece en medio de las pruebas y las dificultades.
Oración de gratitud y petición
La oración del día comienza con una expresión de gratitud a Dios por su amor infinito: Amado Dios, te damos gracias por tu amor inagotable, por tu presencia constante en nuestras vidas y por la paz que nos brindas. Seguidamente, le pedimos sabiduría para cumplir con los propósitos que Él tiene para nosotros: Te pedimos sabiduría para discernir tu voluntad y fortaleza para cumplirla.
Dejarse moldear por la voluntad de Dios
En momentos de dificultad, es natural sentirnos inseguros y desorientados. Sin embargo, la oración diaria nos invita a confiar en el plan de Dios y a dejarnos moldear por su voluntad: Señor, ayúdanos a confiar en tu plan, incluso cuando no lo comprendamos. Que tu paz nos acompañe en todo momento.
El amor a Dios y al prójimo
El Papa Francisco, en una de sus reflexiones, nos recuerda que el amor a Dios y al prójimo nos permite ver a Dios con más claridad: El amor es el camino para ver a Dios con más claridad. Cuando amamos a Dios y amamos a nuestro prójimo, estamos amando a Dios en nuestro prójimo.
Confiando en la respuesta de Dios
Al finalizar la oración diaria, confiamos en que Dios nos ha escuchado y que su consuelo llegará: Señor, te agradecemos por tu escucha atenta y confiamos en que tu consuelo llenará nuestros corazones.
Conclusión
La oración diaria del domingo 28 de marzo es una invitación a conectar con la fuente de nuestra fortaleza y paz: Dios. En medio de las dificultades, encontremos refugio en su amor y sabiduría, dejándonos guiar por su voluntad y buscando su paz que sobrepasa todo entendimiento.
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